El color del videojuego es Gris: la gran adquisición de Xbox, el ruido de Spider-Man 2 y ve a ver gratis a Shyamalan
Tonos grises.
Comenzaba la semana pasada hablando de mi nueva crisis con el videojuego, que ha terminado solventada de la misma manera que las anteriores experimentadas en los últimos años: gracias a un videojuego. Me vienen a la cabeza ahora mismo un par, que hace años sirvieron para que no abandonara esta hermosa vertiente cultural: el primer Dead Space y Catherine: Full Body (os recomiendo ambos, por supuesto).
Esta vez el encargado de volver a ilusionarme ha sido Gris, la excepcional obra de Nomada Studio que por distintas circunstancias vitales todavía no había desfilado por mi pantalla. Qué hermosura, cuánta clase, qué mágica utilización de un lenguaje básico del videojuego trasladándolo a una aventura que es muda, pero que debe jugarse con el volumen bien alto.
No quiero hablar mucho más de Gris, en realidad, porque es la típica obra en la que esgrimir la también típica frase de es mejor que no sepas nada. Adéntrate en cuanto puedas, a poder ser, con una tarde o noche completa que dedicar a comenzarlo y terminarlo del tirón. Muchas veces había abandonado la idea de acercarme a él porque estaba contaminado de tantos títulos independientes que tratan de atraparte por su apartado artístico, pero que terminan patinando en lo que realmente los convierte en videojuegos y no en pinturas o canciones.
Me equivocaba, porque Gris no es un videojuego indie más que puede resultar muy bonito pero que incorpora puzzles añejos y mil veces vistos. Me ha recordado bastante a Journey, no sólo por la representación de un viaje silencioso en el que poder extraer tus propias conclusiones, sino por su capacidad de atraparte y, por supuesto, de volver a enamorarte de algo tan fascinante como los videojuegos.
Y para que no se diga que no soy un verdadero Patriota, qué gustirrinín me da comprobar que dos de los videojuegos que más me han gustado este año han salido de mentes españolas: The Cosmic Wheel Sisterhood (este sí, lanzado este mismo año) y Gris.
Decisiones cósmicas a nivel coloquial: The Cosmic Wheel Sisterhood o cómo Deconstructeam lo ha vuelto a hacer
Cuando juego suelo tomar algunos apuntes, pequeñas ideas muy resumidas en las que poder apoyarme cuando escribo para no olvidar o perder en mis cavilaciones algo que me haya parecido interesante. Con The Cosmic Wheel Sisterhood, el nuevo juego de Desconstructeam, me di cuenta de que no lo estaba haciendo cuando habían pasado varias horas seguidas en lo …
El ruido que rodea a la industria (y a nosotros) me gusta menos
No tan feliz me hace el ruido que rodea todas las semanas a los sucesos de la industria de los videojuegos. Quienes me conocen saben que cada vez me alejo más de la actualidad en sí del medio para disfrutar únicamente de sus obras, porque son las que verdaderamente nos hacen felices. Parte del propósito de este proyecto, además, surge de esa necesidad.
En general, también es un hastío que se une al de las redes sociales, y es curioso que cuanto más alejado estoy a nivel personal de ellas más cerca que nunca estoy a nivel profesional. Porque son un espacio realmente interesante, útil, capaz de conectar más allá, con funciones que despiertan la creatividad y que permiten descubrir algún bello delfín entre tanto océano. Me gustó mucho este artículo de José Nicolás en El País, donde habla en concreto de Twitter (la X de Elon Musk), que probablemente sea el punto de conflicto más evidente.
Pero a lo que voy: una vez completada la adquisición de Activision-Blizzard-King por parte de Microsoft, no he parado de ver comentarios superficiales y peleas por redes. Lo que más me entristece, además, es que parte de esa batalla se origina desde los medios profesionales. Y ojo, no les culpo a ellos, sino a nosotros: para pagar nóminas y que las familias de los trabajadores sean felices -algo que queremos todos- se debe dar lo que el público requiere, y así vamos. Es una pena no haber encontrado más estudios o investigaciones más claves sobre esta adquisición, sobre su verdadero impacto en los consumidores en el futuro o lo que podremos esperar a nivel empresarial a partir de ahora por parte de Xbox. Yo lo comenté más o menos por aquí, porque más allá de los videojuegos en sí -que creo que es un añadido secundario a la operación- el poder obtenido por Microsoft en el terreno de la nube puede ser determinante.
Sí, la nube es el futuro de los videojuegos y el final de las consolas es cuestión de tiempo
Estamos inmersos en una etapa de cambios cruciales en el mundo que conocemos desde distintos ámbitos, más de los que recuerdo haber vivido en mucho tiempo. La aparición de las IAs ya no es cháchara, no es algo que podría suceder -ya lo está haciendo, y un ejemplo son estos datos de
Con Spider-Man 2, el gran lanzamiento de esta semana junto a Super Mario Bros. Wonder, me ha pasado algo similar. He visto poco comentario en redes sobre el juego en sí, sobre lo que propone, lo que evoluciona, lo que haría que despertara en mí una necesidad de real de probarlo. Sin embargo, me he cansado de ver réplicas directas o indirectas a las polémicas sobre su utilización del lenguaje inclusivo. Me entristece profundamente encontrar entre mis allegados tanta polarización y batalla, precisamente en estos tiempos donde todos podemos ver con horror hasta dónde puede conducir eso.
Shyamalan gratis y otras recomendaciones
En el último episodio de Ruido junto a David Oña os comentaba que había comenzado a ver Servant, la serie de M. Night Shyamalan, y que me había fascinado su primer episodio. Ya la he visto por completo y aunque ese golpe inicial se va diluyendo con el paso de las temporadas, me ha gustado mucho. Y siento repetir esto por segunda vez en el mismo texto, pero cuanto menos sepas sobre ella, mejor. Simplemente ponla y disfrútalo. Y una vez terminada echa un vistazo a los contenidos extra, en especial a los que aparece su director charlando sobre su trabajo en ella.
Y lo tienes fácil, porque con esta promoción puedes disfrutar de Apple TV+ gratis durante 3 meses. Supuestamente sirve tanto si ya has estado suscrito como si no, aunque a mí no me ha dejado canjear (cachis en la mar).
Pero es genial si lo puedes aprovechar para ver Servant, y de paso te doy otra recomendación cinéfila que también está en la plataforma: Flora y su hijo Max. La vi el otro día y aunque está lejos de ser la película de mi vida, entre sus tonos iniciales de sábado por la tarde en Antena 3 y su descarada publicidad a Apple, toca temas interesantes, me reí a carcajadas con alguno de sus chistes y es ligerita (es de John Carney, el director de Begin Again, la película que probablemente ha visto toda la población mundial). Bien para complementar a las 3 horas y media de Los asesinos de la luna de Scorsese, si la vas a ver al cine (a ver si yo tengo la ocasión no solo de ir, sino de aguantar sin hacerme pipí).
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Nos leemos la semana que viene. Sed buenos por redes sociales, que os veo.